El enfoque a la solución II: Énfasis en los recursos del cliente

Cuando nos relacionamos con el cliente desde sus recursos estos se activan y se genera un proceso orientado a la solución.
Conectar con los recursos es un primer paso que abre las posibilidades de un cambio significativo.
Desde nuestro rol como coaches, terapeutas, educadores es tremendamente importante creer firmemente en los recursos de la persona.
Creer en los recursos es esencial para transferir la responsabilidad y la propiedad de la solución al cliente.
Creer profundamente en sus recursos nos libera de la tendencia a indicar el camino y de la necesidad de aconsejar lo que debería hacerse.
Cuando estamos enfocados en el problema y no en la solución caemos fácilmente en la tentación de indicar el camino de salida y de tomar un rol directivo. Al estar enfocados en el problema y no en la solución es más difícil sobrellevar la situación del cliente, proyectamos nuestras necesidades e indicamos rápidamente las vías de solución.
Cuando creemos en los recursos del cliente, nos orientamos a la solución y respetamos el ritmo del cliente, conectamos con su libertad y también con la nuestra para dejar de ser directivos.
Desde el respeto a su ritmo, el cliente puede por sí mismo darse cuenta dónde está y dónde quiere llegar. Al ayudarle a conectar con sus recursos, al respetar su ritmo él puede integrar aquello que quiere cambiar con más confianza y creatividad.
Cuando el cliente conecta con sus recursos puede crear una buena sintonía con el pasado para emprender el camino hacia la solución.
El enfoque hacia la solución nos lleva a plantear nuevas preguntas, nuevas respuestas, nuevas imágenes del futuro, mirar positivamente hacia el futuro y menos hacia el problema.
Conectar con los propios recursos es un factor clave para ir realmente a la solución de manera más consistente y efectiva.
Marta Ocampo