Toda relación requiere un intercambio de información para nutrirse y mantenerse viva. Ese intercambio de información crea un flujo de interacción y retroalimentación entre los implicados, crea un dar y un recibir. En las relaciones sociales e interpersonales experimentamos un continuo dar y recibir los unos de los otros. Estamos en un movimiento constante de ida y vuelta entre